Dos presentaciones y dos Recuerdos en el olvido...

Mientras el terror mediático salió con los botines de punta, usando a una niña y su imagen benevolente como su show mediático. Se podría leer como, a falta de Tinelli buena es Ángeles. Sin querer faltar el respeto a la imagen de la pobre niña, ni a la familia claro está, los medios televisivos (sin exceptuar a ninguno) no han parado de hablar del circo que ellos mismos han armado alrededor de un hecho tan atroz como el asesinato de una persona. Pero mientras tanto, nuestro país sigue, y Latinoamérica también. Cristina en la Paternal presenta a sus candidatos por el “Frente para la Victoria”. ¿Somos los únicos que pensamos que eso está mal? ¿No se supone que al ser Presidente de una República, uno debería ser imparcial y no entrar en estos caminos sinuosos de decir a quién debemos votar? En Santa Fe, con su gobernador pasó algo parecido, pero en fin, la provincia sigue, el país sigue y Latinoamérica sigue. Evo Morales y la UNASUR pide las merecidas disculpas por el vil comportamiento con el Presidente Boliviano, claro está las disculpas solo son esperadas, porque de llegar, todavía no llegan.

Al parecer, el único camino es buscar de alguna manera una fortaleza y resistir, clavar nuestra bandera de resistencia y aguantar ahí, eso es lo que nos queda. Analizar lo que está pasando, cómo avanza nuestra cultura y hacia dónde; y aguantar.

Mientras tanto en este año, suceden otras cosas además de hechos atroces y vergonzosos. Por ejemplo dos cumpleaños que como argentinos y orgullosos de nuestra cultura nos deberíamos sentir más que honrados. Julio Cortázar hace 50 años publicaba “Rayuela”, una obra maestra, una novela diferente. Pero esto no termina ahí, detrás de Julito hay un monstruo más grande (Monstruo porque los dos cometieron el delito de darles al pueblo dos cosas peligrosísimas, el hecho de pensar y una imaginación ¡MONSTRUOS! Y lo de grande, simplemente porque el otro ser aberrante era mayor de edad que Cortázar), Jorge Luis Borges hace noventa años publicaba  “Fervor de Buenos Aires” su primer libro de poesías. Claro está, que estos hechos no son tan trascendentales como lo que está pasando en la actualidad, porque la CULTURA en fin, puede esperar. Y para qué contarles de las otras dos publicaciones en el 2013 que tuvieron lugar en Mendoza (Capital) y en San Carlos.

Lamentablemente la memoria nos falla, preferimos olvidarnos de que tenemos memoria y para qué sirve. José Carlos Chiofalo (Director de Teatro), les dice a sus dirigidos que cuando entren a ensayar solo tienen una manera, y esa manera es entrar con su memoria al lado, para poder recordar cómo eran ellos antes ¡Buen consejo, Carlos! Pero lamentablemente en este país no lo sabemos aplicar, porque verdaderamente no nos hubiera molestado un programa de Lanata que hablara solamente de “Rayuela” o un 6, 7,8 hablando todo el programa de “Fervor de Buenos Aires”. Utópico ¿no?   

EQT: Equipo de Teatro

“Godoy cruz hizo una convocatoria de un proyecto para un ciclo todos los jueves, de teatro mendocino para los mendocinos. Después de un mes de no tener respuesta y de que no nos atendieran, nos dijeron que la persona encargada, o sea, no había un jurado, ni un comité, nada. A la persona encargada de ver las obras no le había gustado ninguna. No solo no le gustó la nuestra, sino de todas las que se presentaron no le gustó ninguna, por eso no habían seleccionado nada para el ciclo. Fue una respuesta telefónica y porque nosotros llamamos para ver que había pasado”

EQT

Entrando al delirio

Por el Ingeniero meritorio Carlitos Strunderbelg

Si el amable lector ha tenido la consecuencia de haber tomado debida nota de las observaciones efectuadas hasta ahora en nuestra sección, seguramente llegará a la indubitable conclusión geométrica de que todo ha sido de una lógica aristotélica, copernicana y menotista imbatible.

Pero ese gesto cordial de quien esto escribe (Yo, Carlitos) se ha debido a la precaución que lo inunda para que ningún lector quede inmerso en un mar de procelosas aguas turbulentas e inconmensurables, ya que el delirio no es moco ‘e pavo…

Hemos tenido el cuidado de advertir sobre tipologías, modalidades e inclusive de mostrar ejemplos canónicos y protocolares. Y ahora, que estimamos que nuestros fieles seguidores están lo suficientemente iniciados en estas lábiles arenas de aires y cieno, nos largaremos al más profundo ejercicio del delirio: el delirio por sustancia puro. ¡Agarráte Catilina, dijo Cicerón!

El tema tiene sus puntos oscuros, casi todos sobre las íes y a veces sobre alguna j. Pero la jota es sonora y bailable, tal como le agrada al aragonés y por eso se la pasa saltando y saltando cada vez que escucha esa música. Pero si la jota es propia de Aragón, por qué no se llama la “gue” que sería mucho más certero y apropiado, o bien por qué no le llaman Arajón a esa región? Misterios españoles, que se creían muy futbolísticos hasta que llegaron a Brasil y vieron cómo le hacían tres goles mientras perdonaban la tarjeta roja a tres de sus jugadores por la regla de exclusión del último hombre. Claro que como estos son tan racistas, se quejaban ante el juez holandés de que no habían volteado a ningún hombre, esto es a ningún ser humano. Y ahí se volvieron todos luego de la derrota volando a Barajas, que es lo mismo que habían hecho durante el partido: irse a baraja. Claro que había baraja marcada, como en todo juego de tahúres, y en este caso la que quedó marcada fue la Shakira que no entiende nada de futbol pero va igual por cuestiones del marketing y se la pasó todo el partido buscando al pitcher y al cátcher para organizar su percepción. Pero para hablar de percepción percepción, no hay como los relatores de los partidos que inventan su versión con tanta convicción que se olvidan que los demás estamos viendo lo que pasa y que no tiene nada que ver con las barrabasadas y boludeces que se dicen. Y al que diga que digo boludeces que se lo diga al director para que me lo diga en la cara a ver qué dice. ¿Cómo anda? Todo bien? Mire usté, tanto tiempo hablando y recién lo saludo.

La periferia que resiste.

Hace unos días estuve en la presentación de un libro. Una novela.

El evento se realizó en Eugenio Bustos, San Carlos. Los minutos pasaban y se me presentaban como posibles algunas expresiones que no solían ser normales (creo que hasta imposibles) en este gran valle que es el Valle de Uco.

Por Federico Menseguez

Hace quince días que no tengo esperanza, maldito Enrique, tan bueno cantando y componiendo, pero los consejos no fueron de lo mejor. Mi novia me dejó por ser tan depresivo dice que “no me banca más”, que me vaya a llorar a un lugar donde les interesen mis lágrimas, me echó de casa hace casi cinco horas, estoy a la deriva en esta ciudad. En mi bolsillo hay cien pesos, no, no voy a caer en la trampa de vuelta, no tengo ganas de más consejos. No señor, las calles son mi lugar y de aquí no me voy a mover. He pensado en ir a un psicólogo o a un psiquiatra, no crean que no. Pero eso sería dar el brazo a torcer, reconocer que estoy loco. Que Roberto, el Negro, Arturo y Enrique  no existieron cuando yo los vi. Y sí estuvieron, nadie lo puede negar, ustedes los vieron, los sintieron, los escucharon, prácticamente estaban allí conmigo. No, está vida todavía no me ha ganado para que yo reconozca que estoy loco, quizá aún no estoy preparado para esa travesía. En fin, llego a la Plaza España, me siento frente a la fuente. Los skaters van y vienen, me molestan. Ya es de noche, la gente comienza a irse, ni los cuida coches se quedan. No tengo lugar a donde ir, parece confortable esta Plaza en este crudo invierno. Estoy enojado, en esta semana que pasó no me salió nada bien, ¿lo peor? Dos cosas encasillaré allí. Mi novia me dejó y la otra, pero no menos importante, me perdí el Recital de Rock Daniels en “la Pulpería”. No sé cuál de las dos me duele más. Entre semana me encontré con una chica, me contó que ella tampoco había podido ir, nos lamentamos los dos. Y al final, ya cuando se estaba yendo me comentó “Todos los toques de estos pibes están increíbles, pero me dijeron que el del sábado fue extremo, la rompieron, qué lástima ¿no?”.

Dejo de pensar en eso, me hace mal. Miro a uno de mis costados, nadie en la plaza. Al girar la cabeza, ¡wow! ¡Qué susto! Un hombre, con un chaleco violeta y una camisa rosada, extremadamente flaco, unos matorrales extraños, anticuados en su cabeza, ¡bah! Un loco más de la guerra que se creía Rambo con ese “listón” de colores en la cabeza. Pero no, lo reconozco inmediatamente, el estómago se me revuelve. Es inevitable, está sentado junto a mí. Pero, ¡no! No más consejos, no más preguntas, no más locura. Lo miro fijamente a los ojos, su risa transmite paz. Intensifico mi mirada y le digo con una voz temblorosa:

-Vos no existís, es producto de mi locura man, vos no estás acá-tiene una botella de alcohol en la mano, toma un sorbo, me pasa la botella, la tomo, obviamente.

            -Take it easy man, drink, please, drink for me. Everything is in your mind. A little bit of fantasy here and there.Everything will be fine!(Tranquilízate hombre, bebe, bebe por mí. Todo está en tu mente. Un poquito de fantasía aquí y allá. ¡Todo va a salir bien!)

Para mi pesar, comprendo que está pasando de nuevo, no puedo hacer nada al respecto ¿o sí? Debo sacarle provecho a esta instancia. Lo vuelo a mirar, se da cuenta que me convenció, su sonrisa ya no transmite paz, sino escalofríos. Su mirada hacia mí es totalmente macabra.

                -¿Por qué a mí? ¿Estoy loco?

                - You have to move on and be crazy. Madness is like heaven. (Tienes que seguir adelante y estar loco. La locura es como el cielo.) You’re sad, why? (Estás triste, ¿por qué?)

                -Mi novia me dejó, estoy en la calle. Soy un depresivo más en la calle, sin vida.

                -The history of life is faster than the blink of an eye, the story of love is hello and goodbye. Until one is found again. (La historia de la vida es más rápida que un abrir y cerrar de ojos, la historia del amor es hola y adiós. Hasta que uno se encuentra de nuevo.)

-Pero es que sé que esto no lo puedo superar-Se nota que intenta tranquilizarme. Me palmea el hombro.

-Hey, Knowledge speaks but wisdom listens (Hey, El conocimiento habla pero la sabiduría escucha) You make love, you break love. It's all the same when it ends. Music, sweet music.(Haces el amor, rompes el amor. Es todo igual cuando se termina. Música, música dulce.)

Él intenta darme un empujón, se nota. Me ayudan sus palabras. Mi mente piensa con más sentido. Y las palabras se escurren por mis labios:

                -¿Cuál era tu motor? ¿Por qué la música? ¿Por qué compartirla?

                - Music was my religion (La música era mi religión) Because music doesn’t lie. If there is something to be changed in this world, then it can only happen through music. (Porque la música no miente. Si hay algo que cambiar en este mundo, entonces sólo puede ocurrir a través de la música.) And you have to give people something to dream about. (Tienes que darle a la gente algo que soñar.)

Es increíble ver y escuchar cómo, sin dudar, tiene las respuestas a todas mis preguntas. Hay un aire de complicidad entre nosotros. El alcohol, o por lo menos a mí, está haciendo efecto. Debo preguntarle sobre su música, su arte, sus letras:

                -¿Cómo hiciste para componer esos temas? ¿Cuál era tu inspiración?-Son necesarias mis preguntas, es increíble lo que estoy viviendo. Debo sacarle el mayor jugo posible, antes de que él decida irse.

                - Imagination was the key to my lyrics. The rest was painted with a little science fiction. That's why the blues is easy to play but hard to feel. (La imaginación fue la clave de mis letras. El resto era pintado con un poco de ciencia ficción. Por eso es que el blues es fácil de tocar pero difícil de sentir.)

                -¿Qué buscabas con tu música?

                -Because I wanted to change the world and to change the world, you have to get furnish your head first. However, everything has to come from within, I guess.(Porque quería cambiar el mundo y para cambiar el mundo, tienes que conseguir amueblar tu cabeza primero. Sin embargo, todo tiene que venir desde dentro, supongo.)

Su cara cada vez es más macabra, prosigo, tengo que seguir indagando, necesito entenderlo.

                -¿Cómo llegaste a ser lo que fuiste?

                -I lived in a room full of mirrors, everything I saw was to myself. I took my spirit and I broke my mirrors, now the whole world is here for me to I see them. (Yo vivía en una habitación llena de espejos; todo lo que veía era a mí mismo. Tomé mi espíritu y rompí los espejos, ahora, todo el mundo está aquí para que yo los vea.)

                -Nunca te importo lo que pensaban de vos, nunca.

                -Never I had time to think: What are they thinking of me? If it were me, there would be no such thing as the status quo. Everything I wrote is exactly how I felt, that's all. I kept almost naked. And probably the words were too soft. (No tenía tiempo para pensar: ¿Qué estarán pensando de mí? Si fuera por mí, no habría tal cosa como el status quo. Todo lo que escribí es exactamente lo que sentía, eso es todo. Me mantuve casi desnudo. Y, probablemente, las palabras fueron demasiado suaves.)

Como siempre, le temo a la resolución de mis encuentros. Me levanto bruscamente, lo miro directamente, el me esquiva la mirada, parece que él no quiere que yo me vaya. Igualmente ya está decidido, me debo ir urgentemente.

                -Good Bye, Jimmy. Nice to meet you, really.

Camino casi veinte pasos, siento que me he salvado, pero no. Escucho el grito de él, me dará un último consejo al parecer, como todos los demás.

                -Hey kid, you missed a question, doesn’t matter, I will answer you anyway. I was always this way, because I hate being in a corner. I don’t like being made available only as a guitarist, or only as a composer, or only as a tap dancer. I like to move. (Hey niño, olvidaste una pregunta, no importa, te la voy a responder de todos modos. Siempre fui así porque odio estar en una esquina. No me gusta que me pongan sólo como un guitarrista, o sólo como un compositor, o sólo como un bailarín de claqué. Me gusta moverme.)- Levanto mi mano en signo de saludo y parto. Mientras camino, recuerdo a los chicos de Rock Daniels, el por qué sus recitales son diferentes.

Charles Baudelaire

El cuarto doble

Un cuarto que parece un desvarío, un cuarto verdaderamente espiritual, donde la atmósfera estancada está ligeramente teñida de rosa y de azul.

El alma allí toma un baño de pereza, aromatizado por el remordimiento y el deseo. - Hay algo de crepuscular, de azulado y de rosado, un delirio de deleite  durante un eclipse.

Los muebles tienen formas alargadas, postradas, lánguidas. Los muebles tienen aire de soñar; se dirá dotados de una vida sonámbula, como lo vegetal y lo mineral. Las materias hablan una lengua muerta como las flores, como los cielos, como los soles ponientes.

Sobre los muros ninguna abominación artística. Relativamente al sueño puro, a la impresión sin analizar, el arte definido, el arte positivo es una blasfemia. Así, todo tiene la suficiente claridad y la deliciosa obscuridad de la armonía.

Un aroma infinitesimal de la elección más exquisita, a la que se mezcla una muy ligera humedad, nace en esta atmósfera donde el espíritu durmiente es mecido por sensaciones de sofocación.

La muselina cae abundantemente delante de las ventanas y delante de la cama; se expande en cascadas nevosas. Sobre esa cama está acostado el Ídolo, la soberana de los sueños. ¿Pero cómo está ella ahí? ¿Quién la ha traído? ¿Qué poder mágico la ha instalado sobre ese trono de desvarío y deleite? ¡Qué importa! ¡Allá está! Yo la reconozco.

Vean bien esos ojos cuya llama atraviesa el crepúsculo; esos sutiles y terribles mirones, que reconozco por su tremenda malicia! Atraen, subyugan, devoran la mirada del imprudente que los contempla. Frecuentemente los he estudiado, esas estrellas negras que comandan la curiosidad y la admiración..

¿A qué demonio benevolente debo el estar así rodeado de misterio, de silencio, de paz y de perfumes? ¡Oh Beatitud! Eso que nombramos generalmente la vida, aún en su expansión más feliz, no tiene nada en común con esa vida suprema de la que ahora tengo conocimiento y que saboreo minuto por minuto, segundo por segundo.

¡No! ¡No hay más minutos! ¡No hay más segundos! El tiempo ha desaparecido: es la Eternidad que reina, una eternidad de delicias.

Pero un golpe terrible, torpe, resuena en la puerta, y , como en los sueños infernales, me ha parecido que recibía un golpe de azadón en el estómago.

Y luego un Espectro ha entrado. Es un oficial  que viene a torturarme en nombre de la ley; una infame concubina que viene a gritar miseria y a agregar las trivialidades de su vida a los dolores de la mía; o bien el testaferro  de un director de diario que reclama el término de un manuscrito.

El cuarto paradisíaco, el ídolo, la soberana  de los sueños, la Sílfida, como decía el gran René, toda esa magia ha desaparecido al golpe brutal asestado por el Espectro.

¡Horror! ¡Me acuerdo! ¡Me acuerdo! ¡Sí! Esa choza, esa estancia del eterno tedio, es bien la mía.

He aquí los muebles fatuos, polvorientos, descornados; la chimenea sin llama y sin brasa, manchada de escupidas; las ventanas tristes donde la lluvia ha trazado surcos en la polvareda; los manuscritos, tachados o incompletos; el almanaque donde el crayón ha marcado las fechas siniestras!

Y ese perfume de otro mundo, en el que me embriago con una sensibilidad perfeccionada, ay!

Ha sido reemplazado por un fétido olor a tabaco mezclado con no sé qué nauseabundo moho.

Se respira aquí ahora lo rancio de la desolación.

En ese mundo estrecho, más sí pleno de disgusto, un solo objeto conocido me sonríe: el frasco del láudano; un viejo y terrible amigo; como todos los amigos, ay! fecundo en caricias y en traiciones.

¡Oh! ¡Sí! El Tiempo ha reparado; el Tiempo reina soberano ahora; y con el horroroso viejo ha vuelto todo su demoníaco cortejo de Recuerdos, de Remordimientos, de Espasmos, de Pavor, de Angustias, de Pesadilla, de Cóleras y de Neurosis.

Yo les aseguro que los segundos ahora están fuertemente y solemnemente acentuados, y cada uno, saltando del péndulo, dice: "¡Yo soy la Vida, la insoportable, la implacable Vida!"

No hay más que un Segundo en la vida humana que tenga la misión de anunciar una buena nueva, la buena nueva que causa a cada uno un inexplicable pavor.

¡Sí! El Tiempo reina: ha retomado su brutal dictadura. Y me empuja con su doble aguijón. -" ¡Y arre así! ¡Borrico! ¡Suda así, esclavo!, ¡Vive así, maldito!

El extranjero

-¿A quién quieres más, hombre enigmático, dime, a tu padre, a tu madre, a tu hermana o a tu hermano?

-Ni padre, ni madre, ni hermana, ni hermano tengo.

-¿A tus amigos?

-Empleáis una palabra cuyo sentido, hasta hoy, no he llegado a conocer.

-¿A tu patria?

-Ignoro en qué latitud está situada.

-¿A la belleza?

-Bien la querría, ya que es diosa e inmortal.

-¿Al oro?

-Lo aborrezco lo mismo que aborrecéis vosotros a Dios.

-Pues ¿a quién quieres, extraordinario extranjero?

-Quiero a las nubes…, a las nubes que pasan… por allá…. ¡a las nubes maravillosas!

Entonces, ¿Pactamos?

Medio siglo jugando a la Rayuela

Medio siglo de la publicación de una novela imponente en el campo de la literatura argentina se cumplió el viernes 28 de junio.

                Algo así mencionaron los medios, pero este hecho pasó desapercibido, y no tuvo la atención que realmente se merece. Cansados de que se nos escape la tortuga en cuanto a hechos  icónicos y representativos de nuestra cultura, PALABRAS MACABRAS homenajea los cincuenta años de RAYUELA.

Fue en la calle Alsina al 2049, en los talleres gráficos de la Compañía Impresora Argentina, en Buenos Aires, cuando se terminó de imprimir la obra magistral de Julio Cortázar. Está claro que de todos sus libros es este justamente el que rompe los esquemas. Rompe con cualquier formato clásico de narración, desestructurando el lenguaje y la lógica narrativa.

Cortázar  le anticipa a su amigo Jean Bernabé por medio de una carta cómo inició lo que sería después una obra apoteótica:

 “Lo he empezado por varias partes a la vez, y soy a la vez lector y autor de lo que va saliendo. Quiero decir que, como a veces escribo episodios que vagamente corresponderán al final (cuando todo esté terminado, unas mil páginas más o menos), la cosa es terriblemente complicada, porque se me ocurre escribir dos veces un mismo episodio, en un caso con ciertos personajes, y en otro con personajes diferentes, o los mismos, pero cambiados por circunstancias correspondientes a un tercer episodio. Pienso dejar los dos relatos de  esos episodios porque cada vez me convenzo más de que nada ocurre de una cierta manera, sino que cada cosa es a la vez muchísimas cosas”

La historia de Rayuela transcurre entre Buenos Aires y París, y su protagonista es Horacio Olivera. Pero lo interesante de esta obra, sin restar importancia a lo qué se cuenta, está en el discurso y en cómo se cuenta. Ya que su estructura permite al lector leerla desde tres miradas. La primera  forma es leer y recorrer los capítulos a la manera tradicional, es decir, empezando por la primera página y siguiendo el físico del texto hasta llegar al capítulo 56, otra forma es guiándose por el Tablero de dirección que  propone una lectura completamente distinta, saltando y alternando capítulos. Y por último, la opción de leerlo, como guste, sin un orden establecido.

En tramos de la obra, Julio inventó un nuevo léxico, como una ambición por estar convencido de que el existente no alcanzaba para expresar todo lo que quería decir; y en este nuevo idioma él narra un encuentro sexual:

“Apenas él le amalaba el noema, a ella se le agolpaba el clémiso y caían en hidromurias, en salvajes ambonios, en sustalos exasperantes. Cada vez que él procuraba relamar las incopelusas, se enredaba en un grimado quejumbroso y tenía que envulsionarse de cara al nóvalo, sintiendo cómo poco a poco las arnillas se espejunaban, se iban apeltronando, reduplimiendo, hasta quedar tendido como el trimalciato de ergomanina al que se le han dejado caer unas fílulas de cariaconcia” (Del capítulo 68).

Luego de esto, es imposible poner en duda la grandeza y la inteligencia de este autor que nos lleva y nos trae a su manera, que juega con nosotros, siempre ganándonos y siempre superando nuestras expectativas.

Palabras Macabras quiso conmemorarlo y evocarlo para que no fuera invisibilizado o se convirtiera en un acontecimiento ignoto; e invita a los lectores a sumirse en el mundo de Rayuela.

Debemos rescatar nuestra literatura, revalorizarla y disfrutarla; porque es parte de lo que nos identifica, es parte de una memoria y de una experiencia colectiva que construye nuestra cultura, y por eso es que escribimos sobre Rayuela y lo que significa para nuestra sociedad y no sobre su argumento, porque para eso está el libro, esperando ser revivido a través de la lectura de alguien, descubierto por la mirada de algún nuevo lector o simplemente releída  por algún viejo lector que descubra en ella nuevas claves. Seguramente, todos aquellos que agarren este libro emprenderán un viaje del que es imposible salir ilesos. Y de eso se trata la literatura, de que nos movilice, nos cambie, nos aterre, o nos disguste, pero nunca jamás nos deje indiferentes.

Aquí comparto un capítulo que me estremece hasta la médula, de más está explicar en dónde recaen mis sensaciones… léanlo y saquen sus propias conclusiones.

“Toco tu boca, con un dedo todo el borde de tu boca, voy dibujándola como si saliera de mi mano, como si por primera vez tu boca se entreabriera, y me basta cerrar los ojos para deshacerlo todo y recomenzar, hago nacer cada vez la boca que deseo, la boca que mi mano elige y te dibuja en la cara, una boca elegida entre todas, con soberana libertad elegida por mí para dibujarla con mi mano en tu cara, y que por un azar que no busco comprender coincide exactamente con tu boca que sonríe por debajo de la que mi mano te dibuja. Me miras, de cerca me miras, cada vez más de cerca y entonces jugamos al cíclope, nos miramos cada vez más cerca y los ojos se agrandan, se acercan entre sí, se superponen y los cíclopes se miran, respirando confundidos, las bocas se encuentran y luchan tibiamente, mordiéndose con los labios, apoyando apenas la lengua en los dientes, jugando en sus recintos, donde un aire pesado va y viene con un perfume viejo y un silencio. Entonces mis manos buscan hundirse en tu pelo, acariciar lentamente la profundidad de tu pelo mientras nos besamos como si tuviéramos la boca llena de flores o de peces, de movimientos vivos, de fragancia oscura. Y si nos mordemos el dolor es dulce, y si nos ahogamos en un breve y terrible absorber simultáneo del aliento, esa instantánea muerte es bella. Y hay una sola saliva y un solo sabor a fruta madura, y yo te siento temblar contra mí como una luna en el agua (del capítulo 7)."

Vuelo

Todos saben que en la peluquería no se puede estar callado. Tu peluquero te parla de todos los temas posibles y nunca dejas de tener una charla con el, pero el mío remarca en un tema diferente. Cada tres meses, más o menos, visito la peluquería que se encuentra a unas cuadras de mis casas, y al tipo le encanta hablar de música. De amplificadores, bajos, marcas de instrumentos, cabezales, pedales y tengo que admitir que algunas veces me cuesta seguir el hilo de sus intensas conversaciones, parece todo un profesional en ese ámbito. De todas las conversaciones que hemos tenido, puedo destacar que siempre me nombra a su banda Stoner (para rock pesado un poco más, para metal son un poco menos): V.U.E.L.O. Así que sin darle muchas vueltas a la milanesa nos fuimos en su auto al pequeño lugar de ensayo donde se divierten y disfrutan como si niños fueran, jugando a las escondidas. Se sintió una energía magnífica, donde cada instrumento se destacaba de la mejor manera pero sin estorbar a los demás. Así como deja cada pelo cortado en el suelo de su peluquería, Martin (28 años) lo deja todo con su bajo, se permite llevar por la música y sentir la potencia de Vuelo, se nota esa felicidad de hacer lo que más le gusta y con quienes más le gusta. Con doble pedal y arreglos excelentes, Álvaro (31 años) conducía la batería hacia un ritmo bastante pegadizo. Eduardo (30 años), al igual que Martin, con una afinación distinta, logra impactar con sonidos renovadores. Gustavo (43 años), aunque tuvo algunos desperfectos con el sonido, no se quedó callado. Logró dejarnos bien en claro que su música tiene fuerza. Con guturales y juegos con el micrófono nos mostró algo que pocas veces vemos en un cantante. Los chicos afirmaron en cada oportunidad, que su música es para sentirla, para salir de los esquemas cotidianos y normales para irse a una intensidad fuera de lo normal, volar en su música. V.U.E.L.O.

1-¿Toman mate?

No, Ninguno

2-¿Cuando se formó la banda?

La banda se formó en 2011 con una formación alternativa, la cual fue mutando hasta el día de hoy. En la cual nos encontramos a Gustavo Banco en la voz, Álvaro García en la batería, Eduardo Paladino en la guitarra y Martin fumarola en el bajo

3-¿Y esta nueva formación se ha presentado en algún lugar?

No, pero con el viejo grupo si: En la Nave Cultural, el Teatro Independencia, en La Pulpería y otros bares, pero siempre en Mendoza.

4-¿Porque V.U.E.L.O.?

Porque Volvimos Uniendo Esencias Luego del Ocaso. Es una sigla, no un nombre solamente. Es volar en la música y en la energía que sale de nuestros equipos.

5-¿Cuál es su proyección al futuro como banda?

Tocas demasiadas veces en vivo y, si SADAIC nos da una buena oferta, poner nuestros temas para que toda la gente los compre, así vivir de lo que más disfrutamos. Pero por ahora estamos con nuevo proyecto de grabación que se va a venir aproximadamente en octubre.

6-¿Cuál sería su show perfecto?

Gustavo: Es como mirar hacia adelante, yo creo que eso se lograría con imperfección. Que tocando imperfecto vamos a llegar a sonar increíbles
Eduardo: También tener retroalimentación con la gente, que el público salte y se emocione, que sientan la música como nosotros la sentimos, porque le damos energía amplificada. Salir del escenario diciendo "Hubieron 3 chabones locos por lo que estaban escuchando". Alguien me dijo una vez: No calienta cuanto te esfuerces con el arte que hagas, pero mientras haya una persona que se haya quedado a ver lo que hacés, quedate tranquilo.

7-¿Van a tocar próximamente?

Martín: Si, en un mes (porque todavía estamos cerrando todo lo que va a ser el show que viene). 
Eduardo: Van a ser muchos toques seguidos, pero por ahora tenemos que hacer un par de ajustes de tuerca, porque somos dos integrantes nuevos (Álvaro y Eduardo) que hace menos de 2 meses que estamos en Vuelo.

8-¿Cómo definirías cultura?

Gustavo: Expresión.
Eduardo: La expresión de la gente, la expresión de la esencia de cada artista. Algo que va a perdurar de aquí al final. Cultura es lo que te identifica.
Álvaro: El reflejo de lo que uno tiene, de su expresión, de lo que uno vive, lo que quiere decir.

9-¿Se consideran ustedes artistas?

Si, totalmente

10- ¿Entonces cuáles son los requisitos para serlo?

Martín: Sentir, tener la esencia. Ir más allá de vos como persona. No sos vos, no existís vos, no estás vos, es otra sustancia, otra energía, otra vibración. Transmitir una emoción.
Eduardo: Tenés que compartir lo que hacés, no te lo tenés que guardar para vos mismo

11-¿Qué consejos le darían a una banda amateur que está por comenzar a tocar?

Álvaro: Que escuchen mucha música y que toquen lo que les salga. Si les sale tocar igual a Metallica, háganlo. Solitos se van a ir encaminando hacia su propio lugar.
Eduardo: De hecho es algo que siempre sucede. Muchas bandas empiezan a sonar parecidas a otras. Muchos grupos empezaron a sonar como los Beatles, como Pison, como Guns And Roses y como muchísimas mas bandas. Vos mira a Pantera, empezaron haciendo Glam y terminó siendo lo que es. También les diría que escuchen mucha música. Si hay algo que nos une a todos acá, es que somos melómanos. Creo que de chicos todos hemos tenido nuestros cassettes con miles de bandas que nos han gustado y hemos soñado con estar en esto. Y a la hora de dar un consejo a alguien, es “nunca dejar de ser oyente y ponerte en la sala y que salga lo que salga. Que aporten siempre todo lo que puedan y que hagan lo que sepan hacer.”
Álvaro: Yo no arranqué tocando la batería por ejemplo, yo tocaba el teclado, después toqué por mucho tiempo la guitarra y me di cuenta que la batería era lo mío, fue todo un camino que hice.
Martin: Y ponete a estudiar.

12-¿Hay distintas personalidades entre los integrantes o son generalmente iguales?

Eduardo: Somos muy distintos con ciertas particularidades pero lo que nos une es la música.
Martín: Buscamos un sentido en común y alinearnos de alguna forma pero con las influencias de todo lo que viene. Vamos generando la música con la energía de cada uno: la trae cada uno y se va gestando una filosofía, un camino, una música, un estilo dentro de un parámetro. Básicamente es generar y transmitir la espontaneidad y lograr comunicar algún mensaje en el contenido.

13-¿Y cual es ese mensaje que ustedes dan?

Gustavo: El tema es justamente que la energía puede expandirse a todos los oídos de todo el planeta: lo podés cantar en chino o en inglés o en portugués. Lo que tiene la melodía es lo que pega, porque yo escucho muchísimas bandas de todo el planeta, y justamente cuando pega una melodía, después busco lo que me están diciendo.
Eduardo: La energía, la fuerza y las palabras de lo cotidiano. Es un relato de lo cotidiano y creo que con eso se logra la mayor conexión con la gente, Banco tiene una forma particular de escribir que te identifica mucho; si te pones a escuchar las letras podes asociarlas mucho a tu vida personal. Y eso lo combinas con una banda sonora, que es lo que hacemos con los chicos, y tenés una letra que te dice algo de todos los días como puede ser quizás hasta un orgasmo, pero agresivo, porque es lo que hacemos nosotros. Quizás nos estamos basando en la simplicidad. Y aplicando la fuerza en el sonido para llegar de una forma contundente a la gente. Yo también escucho bandas japonesas y no tengo idea de lo que dice la letra, pero me llega totalmente. Ojalá que algún oyente ruso, croata, japonés o chino esté diciendo lo mismo de nosotros ahora.
Martín: En tu mente está todo el control

14-¿No creen que ese mensaje podría llegarle a mucha más gente mendocina?

Martin: Si el músico se destaca y se esmera, sí.
Eduardo: Es que Mendoza es como el teléfono descompuesto: empieza la difusión y esta difusión no va a llegar al final, hay mucha gente que cree que hasta por facebook se va a enterar de recitales, hay poca cultura de ir a recitales, a teatros, a la plaza. Entonces cuando fomentás un show o algo, eso llega a una cierta cantidad de gente y después se disemina. Hay una cosa muy básica que esta pasando en cuanto a la música: se sigue pagando por tocar acá en Mendoza y para ser un país desarrollado culturalmente, hay que dejar de pagar para hacer espectáculos.
Álvaro: Solo la municipalidad te puede salvar de pagar.
Eduardo: Es que Mendoza es una provincia que prefiere las bandas cover, en Mendoza hay 4 bandas que le hacen cover a Los Piojos, Los Redondos, Guns And Roses. Por ejemplo una de las banda que más lleva a Mendoza es Eclipse, y hacen cover de Pink Floyd. Ahí está el error. No puede ser que en Mendoza una banda tributo de Buenos Aires, llene más que una banda grosísima de acá.

15-¿Quien compone?

Yo como bajista he hecho varios temas de la banda, también letras. Eduardo ha hecho temas, nuestro señor batero también tiene temas, el cantante escribe nuestros temas y también tiene temas que trae arrastrados en el tiempo.
Eso es lo bueno de la banda, que somos todos distintos y todos componemos, no hay una cabeza que comanda, su huella digital la pone cada uno.

16-¿Que opinan del apoyo del arte en los espacios públicos?

Nos parece perfecto
Eduardo: Bueno, de hecho, hace unos dos días me llevé dos sorpresas muy ingratas: primero al mediodía me di cuenta que en la peatonal está tocando una banda que hace música gitana con chelos, oboes, toda una orquesta, bastante bueno; y hace mucho que no se veía eso en Mendoza. Y a la noche había dos flacos con flauta traversa tocando muy buenas obras, obras clásicas en la peatonal. En los dos casos éramos tres personas los que nos paramos a escuchar. Algo bastante malo que tiene acá la gente: la indiferencia, poco apoyo, poco aguante. Hay lugares que se basan en aguante, de hecho.
Gustavo: Yo pienso que es gente con escasas cosas en la cabeza
Eduardo: Bueno es gente que anda con la cabeza en el culo, el mendocino es una persona que se la pasa con la cabeza en el poto. Nosotros somos mendocinos y andamos quizás a una manera en la que nos convertimos gracias a la música y así pudimos ser sensibles con la foto que nos mostraste, pero a veces realmente es el apoyo a la cultura, como vos decías, cultura también es empezar a fomentarla. Yo creo que poca gente puede llegar a sensibilizarse con esto y ver lo del mimo, a mí personalmente no me gusta, pero tiro una moneda, o me paro a escuchar. Yo tengo una foto de los chicos de la flauta traversa, soy ese boludo que se paro a sacarles una foto. Con esto te das cuenta de lo tan errados que estamos acá: Hice en Nueva Zelanda un toque a la gorra, tocando un blues en una calle principal, y me vio más gente de la que en un bar acá. Igual hay buenas cosas, están pasando buenas cosas con la música. Hay que empezar a ir a los festivales porque hay cosas buenas. Hay muy buenos artistas en Mendoza, hay bandas sonoras para películas y mucha gente ni los conoce.
Martin: Pero la suerte también influye

17-¿Porque esta sociedad se aleja cada vez mas de la cultura y lo que ella lleva implícita?

Gustavo: Mucha televisión, la TV los ciega, es un medio muy fuerte.
Álvaro: Eso viene un poco más de arriba, del gobierno. El gobierno se aprovecha de su pueblo ignorante.
Eduardo: Hay un tema tecnológico: se empieza a romper una identidad con este tema tan globalizador. Empieza a cambiar y hay gente que quizás vive con la cabeza más en Noruega que en Argentina. Antes, acá en Mendoza había una movida gigantesca de bandas, de cines, de arte pero ahora estamos más comunicados con el mundo exterior y empezamos a querer lo que no tenemos acá. Aunque no lo veo tan así, hay gente que le interesa el arte de Mendoza.

17-¿Se puede escuchar su música de alguna manera?

Si, esta es nuestra cuenta en sound cloud donde hemos subido 4 temas